10 MOMENTOS HISTORICOS Sobre WOLFSBANE / RAHNE SINCLAIR



La vida de un mutante en el universo de los cómics de Marvel rara vez es sencilla, pero pocos personajes han experimentado tantos traumas como Rahne Sinclair, conocida como Lupina. Su historia está llena de desafíos, desde lavados de cerebro hasta romances prohibidos, lo que la convierte en una de las narrativas más trágicas del mundo mutante. Este personaje que ha sido parte de equipos como los Nuevos Mutantes, los X-Men, X-Factor y X-Force, pero que parece nunca haber encontrado un lugar al que pueda llamar hogar.

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ORIGEN
Rahne Sinclair nació en Escocia, en un entorno complicado. Su madre, una trabajadora sexual, falleció durante el parto, y su padre era un sacerdote local llamado el reverendo Craig, quien optó por criar a Rahne sin revelar la verdadera historia de su origen. El reverendo Craig le inculcó a Rahne un estricto código moral religioso, siguiendo la tradición católica, como una forma de redimir su propio pecado. Cuando Rahne comenzó a manifestar sus poderes mutantes, que involucraban la licantropía, se encontró perseguida por un grupo de aldeanos religiosos fanáticos que la consideraban poseída por el diablo. Esta persecución la llevó al borde del agotamiento, y finalmente cayó inconsciente, transformándose de nuevo en su forma humana, desnuda, a los pies de la Dra. Moira MacTaggert. Moira intervino y protegió a la joven mutante de la ira de la multitud. Rahne fue acogida por Moira y, posteriormente, presentada al profesor Charles Xavier.

NUEVOS MUTANTES
Rahne pronto se vio involucrada en una importante misión de rescate cuyo objetivo era salvar al Profesor Xavier de las garras de Donald Pierce, un miembro influyente del Hellfire Club. Gracias a la colaboración de Cannonball, Karma, Mirage y Sunspot, lograron rescatar al Profesor, quien, como muestra de gratitud, aceptó entrenar a este nuevo equipo de jóvenes mutantes, conocidos como los Nuevos Mutantes. Durante esta etapa, Rahne adoptó el nombre en clave de Lupina. En el marco del Instituto Xavier para Jóvenes Superdotados, los Nuevos Mutantes fueron guiados por las enseñanzas del Profesor X y se sometieron a rigurosos entrenamientos en la Sala de Peligro para dominar sus habilidades. Sin embargo, Rahne, debido a su educación religiosa, tuvo dificultades para aceptar algunas de las costumbres y comportamientos de sus compañeros de equipo. Además, luchaba internamente con sus propios sentimientos románticos, que consideraba como pecaminosos y que la hacían sentirse mal a los ojos de Dios.

FACTOR X
Los Nuevos Mutantes sufrieron un secuestro y fueron llevados a Genosha, donde experimentaron la pérdida de sus poderes y su dignidad. Rahne, en particular, enfrentó una serie de terribles tribulaciones: su cabeza fue rapada, le tatuaron un número en la frente y sufrió un lavado de cerebro. Aunque finalmente fue liberada de esta influencia, quedó marcada por las secuelas, lo que la impedía volver a su forma humana sin caer bajo un control mental. En este punto, Lupina se convirtió en miembro de la segunda encarnación de X-Factor. Durante este tiempo, ella formó una estrecha amistad con Jamie Madrox (el Hombre Múltiple) y Guido Carosella (Strong), pero también luchó con sus propios sentimientos hacia Havok. El lavado de cerebro que sufrió, combinado con las fluctuantes hormonas de su estado de transformación, la llevaron a desarrollar una atracción hacia Havok y a sentir celos intensos de su relación con Polaris. Eventualmente, Rahne logró curarse de su estado de transición y recuperar su forma humana.

UN AMOR EN ASGARD

La hechicera asgardiana Enchantress llevó a cabo un secuestro de los Nuevos Mutantes, transportándolos a Asgard. En este extraño mundo, Rahne se encontró en Jotunheim, donde entabló una relación con Hrimhari, el Príncipe Lobo de Asgard, quien la rescató de las garras de los gigantes.

A pesar de que la relación entre Rahne y Hrimhari fue apasionada, lamentablemente fue de corta duración. Los héroes de la Tierra recibieron la noticia de que, si uno de ellos decidía quedarse en Asgard, todos deberían renunciar a su regreso a casa. Este desgarrador dilema forzó a Rahne a tomar la dolorosa decisión de abandonar su amor por el bienestar de sus amigos y su regreso a casa.

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